El "Retractus" es una efigie principalmente de una persona (aunque también de un lugar) que tiende a la descripción de la figura o carácter, o sea, de sus cualidades físicas, morales e históricas. Un gesto, un arrebato o una mirada determinan su peso, la importancia está en recoger esos elementos.
"Gente" es una muestra de aquellos seres humanos que en su diversidad, nos ofrecen parte de sus particulares formas de ser y entender el mundo.